LO QUE ESTÁ EN RIESGO CUANDO ESCUCHAMOS A ALGUNOS OPOSITORES DECLARAR Y DECLAMAR EN LA S.R.A: Asignación universal y su impacto positivo en cifras reales.
por Micaela Zapata, Politóloga integrante DE GEENaP
Los impactos positivos
de uno de los principales instrumentos de protección social como lo es la
Asignación Universal por Hijo (AUH), se han destacado, en múltiples ocasiones,
desde distintos ámbitos. Esa amplia
gama de perspectivas, contiene también la voz del Observatorio de la Deuda
Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA). En
un reciente informe, las analistas Ianina Tuñón y Agustín Salvia, observan el
impacto de la herramienta en el "bienestar económico medido por el ingreso
per cápita familiar", en relación a la "pobreza económica y la
seguridad alimentaria" y en la “exclusión educativa y el trabajo
infantil". La relevancia de los resultados en cada aspecto, importa tanto
como el detalle de la metodología empleada. En parte, el informe plantea la
necesidad de brindar fortaleza al análisis a través del uso de métodos
cuasi-experimentales. Si bien en las Ciencias Sociales es difícil controlar
variables para estudiar los fenómenos, es cierto que, en determinados casos es
factible elaborar grupos muestrales más sólidos en sus características. En este
caso, se crearon dos grupos, un grupo participante, representativo de las de
niños, niñas y adolescentes beneficiarios de la AUH y otro grupo de comparación
de niños, niños y adolescentes no beneficiarios de ningún programa de
transferencia de ingresos. Todos ellos casos pasibles de ser elegidos para la
asignación. Los años bajo análisis son el 2010, 2011 y 2012. Se indica que la metodología importa, porque
esta impacta directamente sobre los resultados, y aporta o no la capacidad de
comparación entre las estimaciones. Se hace referencia, en particular,
a importantes índices como el de pobreza. El índice elaborado por el mismo
Observatorio, produjo una serie de críticas relacionadas a la selección de una
cantidad reducida de aglomerados urbanos (ocho) para el armado de la muestra. Esto
- sumado al gran desvió en la representatividad de la encuesta con respecto a
los sectores de ingresos bajos, medios y altos - explica la diferencia entre el
dato impartido por el Observatorio: 27,5% y el del INDEC, surgido de la
Encuesta Permanente de Hogares (EPH) de 18,3%, siendo éste último notablemente
menor. La crítica - realizada desde el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz
(CESO) - al índice UCA, se fundamenta también en que, por lo expuesto
anteriormente, el dato GINI ODSA-UCA demostraría una baja desigualdad en los
ingresos de la población, indicando un valor de 0,273, en comparación con el
del INDEC, situado en 0,413. Retornando
a los resultados del informe ODSA - AUH, el ingreso per cápita familiar resulta
siempre mayor en el grupo que percibe la AUH y mantiene una impronta
progresiva, en tanto que el impacto de la transferencia de ingresos es mayor
sobre el 10% de los niños, niñas y adolescentes con más bajos ingresos de la
muestra. Con respecto a los resultados en relación a la pobreza
económica, la AUH redujo en un 35% los riesgos de caer en la pobreza extrema,
aunque con un impacto menor en la reducción del riesgo respecto de la pobreza
ampliada (5%). Finalmente, el impacto en la educación indica una reducción del
61% en el riesgo de inasistencia escolar para el grupo que recibe la AUH. En
relación al impacto sobre el trabajo infantil, indica que el grupo que recibió
el beneficio es relativamente mayor y gradual en el tiempo, para los niños y
niñas más pequeños. Resulta fundamental tener en cuenta, que, en la contraparte
de los datos, está el sostenimiento permanente de la política de transferencia
de ingresos. No sería posible
observar el mismo impacto si no existiera una actualización de los montos
correspondientes a los instrumentos de transferencia. Según un
informe de CIFRA del mes de mayo del corriente año, la actualización del mes de
Junio de la AUH, significa un incremento real del 37,5% respecto del mes
anterior, alcanzando el pico de mayor poder adquisitivo desde su
implementación. Siempre es importante y necesario dirigir esfuerzos al
planeamiento de nuevas y mejores políticas sociales que impliquen avances en
términos de magnitud del alcance y en el grado (intensidad en el efecto
esperado). En este sentido, la AUH
significó, incluso para quienes adoptan muchas de las posturas más críticas, la
puesta en práctica de un nuevo paradigma de las políticas sociales en Argentina
con
importantes resultados positivos en los diferentes aspectos de la vida de los
sectores de menores ingresos.
Fuente:
Ámbito Financiero
Comentarios
Publicar un comentario