por Javier Martín Miró
Ingeniero Agrónomo
A
fines de los 50 el escritor Americano Joseph Heller escribió la novela “Catch
22”, la obra fue publicada en el 61. En ella cuenta las peripecias de un
piloto, durante la segunda guerra mundial, que debe enfrentar problemas
insolubles o que la solución esta negada por reglas o circunstancias.
En
el mundo anglosajón se usa la frase “catch 22” para este tipo de situaciones;
por ejemplo si pierdo mis anteojos y trato de encontrarlos, ocurre que no puedo
ver donde están si no tengo mis anteojos puestos; esto es un catch 22
No
importa en este caso cuan grandes tenga las bolas el presidente Obama. Está
ante una situación de desventaja que no debería estar ningún jefe de estado
soberano. El tema de volcar fondos de dinero para abiertamente apoyar tal o
cual política, amenazar, poner o sacar jueces convierte al sistema y a los ideales
por los cuales lucharon millones de personas, generaciones enteras, y muchos de
ellos con su propia vida en un triste juego de marionetas. Libertad, democracia, el derecho a progresar,
a tener una chance, el sistema político y los derechos más básicos son
pisoteados por estos personajes perversos.
El
derecho de Singer de llevar a juicio a un gobierno había sido removido en los 90
ante la causa con Perú y se la reinstituyo en el 2000 (era Bush) para poder
hacerlo con Argentina.
Las
regulaciones necesarias para evitar el debacle del sistema financiero del 2007
estaban instauradas en los 90 (era Clinton) y un grupo de estos financieros
Bear-Stearns, Lehman Brothers, Merrill-Lynch, AIG, FannieMae, FreddieMac, and
Citigroup Goldman- Sachs and Morgan-Stanley le dieron el ultimátum para que
desregule. La reforma la termino Bush y después sabemos lo que ocurrió.
Todo
lo que se escribió acerca del poder y la política en los libros clásicos no
contemplan la posibilidad de individuos ejerciendo el poder.
Paco
ResponderEliminarMuy enriquecedora tu lectura sobre el tema. Y me quedo con el nudo de la cuestión; cosa que queda plasmada en el último párrafo.
Te mando un abrazo y gracias por participar. Tu visión "anglosajona" crítica de más de dos décadas de antigüedad nos despabila sobre muchas cuestiones que ni siquiera sospechamos.
La trampa 22 de la novela de Heller la sintetizaba el protagonista, un tal Yossarian, cuando iba al psiquiatra del regimiento donde era capital. El tipo para zafar de la guerra fingía estar loco (aunque no necesitaba fingir mucho).
ResponderEliminarLa trampa era que si el tipo estaba loco, zafaba, pero…, para ir a esa guerra había que estar loco así que no podía zafar.
Mike Nichols la llevó al cine en 1970, con Alan Arkin de protagonista.
capitan, no capital
ResponderEliminarCatch 22: Los que nos endeudaron dicen que hay que pagarle a los buitres. Entiendo
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